La neurociencia detrás de las rupturas: Por qué duelen y cómo superarlas

Las rupturas son muy dolorosas, ¿Por qué es difícil mantener el no contacto? ¿Por qué piensas obsesivamente en tu ex?

No es por que seas tonto o débil, es por que estar cerca de alguien hace que tu cerebro emita neurotransmisores poderosamente gratificantes, como la dopamina y la oxitocina. Sin ellos el cerebro puede volverse loco a medida que comienza a separarse de ellos.

De acuerdo con numerosos estudios sobre las vías neuronales, la curación de un corazón roto se reduce esencialmente a volver a cablear tu cerebro, lo que requiere de compromiso y fortaleza.

Durante el periodo de abstinencia, cuando tu cerebro está tratando de crear nuevas vías neuronales, las viejas vías de recompensa que buscan el placer intentarán convencerte de que te acerques a tu ex para obtener una dosis de esos neurotransmisores para sentirse bien. Pero esto no hace mas que retrasar tu proceso de curación.

Estás intercambiando salud de largo plazo por gratificación inmediata cada vez que te rindes.

Durante una ruptura, el cerebro trata desesperadamente de buscar alivio. Y no es solo dolor emocional lo que sentimos. De hecho, sentimos dolor físico cuando atravesamos una ruptura. Los estudios demuestran que las mismas partes de nuestro cerebro se encienden durante una ruptura que cuando tenemos un hueso roto o un dolor de muelas.

Además de eso, la parte de tu cerebro que está a cargo del pensamiento lógico y racional es literalmente secuestrada por la parte de tu cerebro que responde a las emociones, por lo que podrías olvidar todas las partes malas de tu relación.

Durante una ruptura, debes recordar: tu mente no es tu amiga, de hecho, es tu peor enemiga. Tu menta está buscando una cosa, y sólo una cosa: ¡alivio inmediato del dolor! Pero esto a menudo resulta en volver a lo que te causo el dolor en primer lugar. Esto es el mismo ciclo en el que los adictos a las drogas quedan atrapados.

En cambio, puedes engañar a tu cerebro reemplazando los neurotransmisores gratificantes de los que se está separando:

  • Las interacciones significativas con familiares y amigos cercanos aumentarán tu serotonina

  • El ejercicio libera endorfinas, la hormona de la felicidad, del sentirse bien

  • Escuchar música, dormir lo suficiente, abrazar a un amigo, aumentará tus niveles de dopamina.

Las rupturas no son tan simples como dejar ir a la persona. Si quieres seguir delante de la manera más rápida y saludable posible, debes estar atento a lo que suceda a nivel neurológico y buscar nuevas experiencias y personas que desencadenen esas hormonas del bienestar que no involucren a tu ex.

Al igual que los huesos rotos, los corazones sanan. Y resulta que la neuroplasticidad y la paciencia son los ingredientes clave para seguir adelante.

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